El grupo se arma buscando pistas sobre La Mano Roja en una taberna de Arbolada. Un local parece escuchar la conversación y trata de huir, pero lo detienen y les confiesa que los matones se ocultan en una vieja torre al este.
En el viaje emboscan a una banda de goblins, aparentemente sirvientes de La Mano. No logran sacarles mucha información pero parece que los goblins estaban de paso.
Cuando llegan cae una tormenta. La torre parece desierta, salvo por alimañas y un Riverclaw que casi se devora al enano. En el fondo descubren que la torre fue una base de La Mano, pero ya se retiraron con los prisioneros para Mercado Grande. Lo que ahora duerme en la torre es un Owlbear furioso.
El grupo regresa a Arbolada con nuevas pistas y preparan un viaje a Mercado Grande. Van a ir en barco junto con otros mercaderes, pero en una parada son asaltados por un pequeño ejército de hobgoblins. Sobreviven al combate, pero uno de los mercaderes grita desesperado "¡se la llevaron! ¡se llevaron a mi hija!".
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